Palabras como monitorización, analítica y medición, son oídas frecuentemente pero lo cierto es que pocas empresas optimizan su página web en función de los datos obtenidos para así mejorar su conversión, incrementar la permanencia en el sitio, o reducir la tasa de rebote. Simplemente se limitan a hacer informes con datos de la página web. Eso no es Analítica Web eso es reporte web.
Para evitar esto es importante que tengamos en cuenta que cualquier proceso de Analítica Web con éxito debe pasar por las siguientes fases:
- Objetivos que queremos alcanzar con el análisis: Para poder analizar los resultados que hemos obtenido, es imprescindible tener claro previamente los objetivos que queremos alcanzar como organización a nivel general y con la estrategia de marketing digital en particular. Estos objetivos estarán basados en una serie de KPI.
- Reporte de los datos.
- Análisis de los datos: Analizar los datos conseguidos mediante la Analítica Web no es sencillo. La interpretación se debe basar en los KPIs definidos y en los objetivos que la organización ha establecido en su estrategia general de marketing.
- Interpretación de los datos: Manejar las herramientas de analítica es relativamente sencillo, lo que es más complejo es saber interpretar la información obtenida a través de ellas. El analista web deberá obtener sus propias conclusiones y hacer recomendaciones, buscando siempre el conocimiento y la reflexión y no simplemente el dato.
- Acciones en el sitio web: Es importante analizar pero lo verdaderamente importante es plantear una serie acciones en base a todos los datos obtenidos. Tener documentos y presentaciones llenos de cifras y datos por sí solo no sirve para nada, es necesario convertir esa información en conocimiento para mejorar la gestión y optimizar el sitio web.
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